Venezuela, entre el socialismo y la miseria.

Venezuela, Entre el socialismo y la miseria.

Una de las palabras más repetidas en nuestro país es “socialismo”, los políticos la usan a diario para definir su sistema, para muchos, la palabra es sinónimo de abundancia, de riqueza espiritual, de bondad y calidad humana desbordante, para otros significa un mar de ayuda caritativa y regalos a la población. Sin duda alguna, pocos saben realmente de qué se trata, la tarea a las que nos hemos abocado en este capítulo es a definir al socialismo, a desnudarlo, a explicarlo y sobre todas las cosas, a desenmascarar al asesino en masa que hay en él.

Debemos empezar por definir qué es el socialismo, el Diccionario de la Real academia española define al socialismo como: “Sistema de organización social y económica basado en la propiedad y administración colectiva o estatal de los medios de producción y distribución de los bienes” en pocas palabras, el socialismo en un sistema de administración político y económico donde los factores de producción pasan de las manos del sector privado al sector público, es decir, donde los derechos de propiedad se ven constantemente amenazados por parte del Estado, todo esto se lleva a cabo en nombre del bien común o del “pueblo”.

Por otra parte, el profesor Jesús Huerta de Soto en su libro Socialismo, cálculo económico y función empresarial nos ofrece su definición de socialismo “todo sistema de restricción o agresión institucional al libre ejercicio de la acción humana o función empresarial que suele justificarse a nivel popular, político y científico, como un sistema capaz de mejorar el funcionamiento de la sociedad y de lograr determinados fines y objetivos que se consideran buenos”

Si bien, esta es la definición actual para el término, otrora era diferente y solía usarse para expresar otro concepto. Históricamente, el uso del término Socialismo ha sido ligado íntimamente a una forma de organización social dentro del Estado, desde los defensores del Contrato Social como Ferdinando Facchinei en el siglo XVIII, como fundamento para las relaciones humanas en sociedad, se usaba en referencia al pacto implícito que hacían las personas para vivir en sociedad, aceptando así tanto la autoridad como las leyes en sometimiento a éstas, es decir al contrato social.

Posteriormente evolucionó para designar un nuevo modelo de sociedad productiva desde la concepción de Claude Henri de Rouvroy que llamaríamos una tecnocracia entre científicos e industriales para reducir la ineficiencia provocadas por las clases al poder (tanto la nobleza como el clero) puesto que pensaba que era la causa por la que la sociedad se estancaba en la pobreza. hasta en la modernidad como un sistema de organización social y económica basado en la propiedad y administración colectiva de los medios de producción y distribución de los bienes dentro del Estado en un Libre Mercado.

Cabe destacar que estos teóricos en última instancia se centraban en la idealización de un sistema que girase en torno al ser humano, para acabar con los privilegios del sistema de su tiempo, que agudizaba de manera marcada las diferencias entre clases sociales. Los teóricos defendían un sistema que permitiera un entorno de desarrollo social en condiciones más justas, sin embargo, éstos individuos a pesar de que abogaron por la Libertad de Mercado en realidad no comprendieron la raíz del problema de la sociedad, que era la ausencia del mismo libre mercado.

Con la aparición de Karl Marx y su teoría del comunismo científico las acepciones de este término empezaron a variar, Marx afirmaba que el socialismo era una etapa previa al comunismo y que esta era crucial para lograr la utopía comunista. En esta etapa los trabajadores explotados debían alzarse en armas en una revolución que les arrebatara las empresas y las tierras a sus dueños capitalistas para luego ser administradas por ellos, a si vez, esta revolución debía trascender hasta alcanzar el poder político y de esta manera consolidar la dictadura del proletariado.

Con base en esta teoría surgen las revoluciones socialistas del siglo XX, empezando en la Rusia zarista durante la Primera Guerra Mundial, de la mano de los revolucionarios como Vladímir Ilich Uliánov, mejor conocido como Vladimir Lenin. Este fue el primer intento de aplicar la teoría marxista del socialismo y trajo consigo un fracaso estrepitoso, registrando en sus primeros años la mayor caída de la producción en la historia humana, esto no fue casualidad, esta caída fue consecuencia de las políticas aplicadas por el gobierno soviético y que aún hoy, se siguen implementando.

En nuestro país este sistema ha sido aplicado de manera “dosificada”, después de la caída del dictador Pérez Jiménez los gobiernos democráticos empezaron a instaurar el modelo socialdemócrata, el cual es una variante del socialismo que también ha fracasado, inclusive en Venezuela. Con la aparición del expresidente Chávez a finales de los años 90 se empezó a hablar del socialismo del siglo XXI. Venezuela fue uno de los primeros países en adoptar este “nuevo modelo” económico y político que, al final, terminó teniendo de novedoso lo mismo que de exitoso, es decir: absolutamente nada. Este socialismo del siglo XXI solamente le ha traído desgracias, miseria y ruina a nuestro país, no hay catástrofe natural que se le compare, el socialismo siempre será peor.

Crisis socialistas ¿consecuencias del modelo o errores de los gobernantes?

Mucho se habla sobre los “errores del modelo” del actual presidente de Venezuela, la tendencia a pensar que las circunstancias en las que vive la población venezolana son producto del error de un gabinete y no de un error teórico sólo agrava el problema venezolano. Por otra parte, es común leer a los intelectuales refiriéndose al caso venezolano como Capitalismo de Estado o un falso socialismo, esto está alejado de la verdad, si tenemos en cuenta la definición del profesor Huerta (tercer párrafo) podremos entender que lo que vive Venezuela es verdadero socialismo.

Venezuela es un país que se declara y vive abiertamente bajo un modelo de planificación central de la sociedad y de la economía, podemos corroborar eso tan solo al prestar atención a la causa de la crisis económica del país. En primer lugar, el país vive bajo un régimen cambiario de divisas, lo cual hace que estas escaseen y, por ende, tengan mayor valor en el mercado negro, más adelante profundizaremos sobre el tema. Esta medida, como muchas otras son un mecanismo de control sobre la economía, lo que demuestra que el sistema socialista está siendo aplicado en Venezuela.

En el mismo orden de ideas, podemos corroborar que no son errores de los gobernantes, sino consecuencias del socialismo toda la crisis venezolana, al ver la política monetaria del gobierno, la cual gira en torno a la impresión de dinero sin respaldo, lo que trae como consecuencia los altos niveles de inflación que existen en el país, esta es otra medida que está presente en el modelo de planificación central o socialismo, por lo cual, no se trata de un error de Nicolás Maduro, sino de una consecuencia del modelo socialista.

Para demostrar que Venezuela si vive regida bajo una dictadura socialista hay que revisar sus índices de libertad económica, Venezuela se encuentra de último lugar en la región en el índice de libertad económica y ocupa el lugar 179 en el índice mundial, en una lista que mide 179 países del mundo. Si analizamos de cerca la definición que nos brinda el DRAE sobre el socialismo podremos verificar que dicho modelo, elimina totalmente la propiedad privada y esta pasa a manos del Estado, lo que significa que, la libertad económica de cada individuo queda totalmente suprimida.

Para concluir, es necesario resaltar que los aspectos más nefastos y macabros del socialismo están ocultos debajo de su manto de humanidad, lo que para algunos parecía ser bueno en teoría, resulta realmente perjudicial en la práctica, ya que este sistema elimina los derechos fundamentales del hombre y lo despoja no solo de su propiedad, sino también de su dignidad, sumiéndolo ante el Estado todopoderoso. El socialismo y sus medidas empobrecen a la población, destinándola a sufrir y padecer de los males de la pobreza, de hambrunas y de la terrible escasez de bienes y servicios básicos para la vida, este es el modelo político económico que ha asesinado más personas en toda la historia de la humanidad y es una prioridad que sea abandonado, desechado y olvidado de Venezuela.

No importa cuántas veces repitan que la “guerra económica” ha destruido a nuestro país, ni cuantas veces digan que el capitalismo es el culpable de nuestros males, ni mucho menos cuántas veces le laven la cara al sistema diciendo que esto no es socialismo verdadero, nosotros vamos a gritar incansablemente la verdad, vamos a repetir y denunciar la causa del problema y la causa del problema es el socialismo.

 Luis Fernando Ojeda.